Como la inflamación aguda se vuelve crónica

Un escenario posible es que el sistema inmunológico entre en "modo de amenaza" cuando no existe una verdadera amenaza. En un trastorno autoinmune, el sistema inmunológico parece volverse demasiado sensible a las células y tejidos sanos del propio cuerpo. Reacciona contra las articulaciones, los intestinos u otros órganos y tejidos como si fueran peligrosos. A medida que continúa la respuesta inflamatoria, daña el cuerpo en lugar de curarlo.
Las elecciones de estilo de vida poco saludables también pueden causar una inflamación continua. Fumar, no hacer ejercicio con regularidad o comer una dieta alta en carbohidratos refinados pueden contribuir a la inflamación crónica. Esta inflamación continua aumenta el riesgo de muchas enfermedades, incluidas las enfermedades cardíacas, los accidentes cerebrovasculares, la diabetes, el cáncer y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, que son en conjunto las principales causas de muerte en todo el mundo. Tres de cada cinco personas en todo el mundo mueren a causa de una enfermedad que se ha relacionado con la inflamación.
Signos y síntomas de inflamación crónica:
- fatiga y falta de energía
- depresión ansiedad
- dolores musculares y articulares
- estreñimiento, diarrea y otras molestias gastrointestinales
- cambios de peso o apetito
- dolores de cabeza
- un estado mental "borroso" (niebla mental).
Agregar a tu alimentación
Alimentos de color naranja intenso, amarillo y rojo y verde oscuro, como calabaza, pimientos morrones, tomates, zanahorias, col rizada, espinacas, acelgas, rúcula y endivias
Verduras crucíferas como brócoli, coliflor y repollo.
Cebollas
Alimentos de color azul oscuro o morado, como arándanos, moras, ciruelas y uvas Concord
Frutas cítricas, como naranjas, toronjas y pomelos.
Granos integrales, como trigo, avena, centeno, trigo sarraceno, mijo, quinua y arroz integral
Proteínas de origen vegetal, incluidos frijoles secos, lentejas, pasta de lentejas y soja
Nueces y semillas, incluidas nueces y almendras, y semillas como chía, lino y cáñamo
Especias y hierbas, que incluyen jengibre, ajo, cúrcuma, cardamomo, pimienta negra, canela y romero.
Bebidas como agua, tés de hierbas y verdes y café.
Que evitar en tus compras
Carbohidratos refinados, como pan blanco, arroz, pasta y repostería.
Intente mezclar arroz blanco y integral, pasta blanca y de trigo integral o dulce con cereal sin azúcar.
Alimentos fritos, como papas fritas, papas fritas y rosquillas
Hornee sus propias papas fritas con la piel, pruebe los chips de col rizada o use una freidora.
Refrescos endulzados con azúcar, bebidas de frutas, tés endulzados y cafés aromatizados
Reemplácelo con agua mineral con gas, agua infundida, té y café sin azúcar.
Carnes procesadas, como perros calientes, salchichas, mocosos y carnes rojas.
Pruebe comidas sin carne o use carne como guarnición en lugar de plato principal.
Manteca vegetal, manteca de cerdo y margarina, y alimentos elaborados con estas grasas
Utilice todas las grasas en pequeñas cantidades y busque aceites más saludables, como el aceite, la canola o el aguacate.
Referencia:Harvard Medical School 2021, Mayoclinic 2021